#38. Sobre el atún rojo. Thunnus thynnus

atunEl atún rojo, la tonyina en catalán es una especie emblemática cuya pesca atesora una tradición milenaria. Se trata de un pez altamente migratorio que puede llegar a alcanzar mas de 3 metros de talla que corresponden a un peso de hasta 725 kilos en una vida de incluso más de 35 años. Se encuentra en el Atlántico norte y en el Mediterráneo y sus movimientos migratorios se asocian a los principales corrientes marinas. Su reproducción tiene lugar en el Mar Mediterráneo y en el Golfo de Méjico. Precisamente un aspecto relevante de su complicada biología lo constituye la llegada en la primavera, al Mediterráneo occidental, de las hordas de atunes que vienen desde el océano Atlántico a reproducirse, siendo las aguas del archipiélago balear uno de los lugares de concentración más importantes. La estancia de estos atunes en el Mediterráneo apenas dura seis semanas, si bien existen cardúmenes de reproductores y juveniles residentes que permanecen visibles en el Mediterráneo occidental hasta bien avanzado el otoño en áreas más alejadas en dirección al golfo de León.

almadrabaEn los últimos 100 años se han producido en las pesquerías de atún rojo episodios críticos como fue el colapso de las pesquerías de Noruega y Mar del Norte en los últimos años 1970 o la crisis en las pesquerías tanto de la parte oeste como del este del Atlántico en los años 1960. Esta última fue determinante para el fin del Consorcio Nacional Almadrabero de Andalucía cuando la almadrabas habían sido durante siglos el sistema tradicional de pesca del Atún en el Mediterráneo.

captura almadraba

Estos días he tenido ocasión de hablar con mi colega y buen amigo Pepe Cort sobre el atún rojo y su muy rentable pesca . No creo exagerar lo más mínimo si digo que se trata de uno de los mejores conocedores del atún rojo y de sus pesquerías, una autoridad mundial en la materia, por ello sus comentarios merecen una máxima atención.

Pepe, como yo, es mallorquín y ambos nacimos justo a la mitad del siglo XX, aunque  no nos conocimos hasta 1969 al llegar la Universidad Complutense de Madrid para estudiar  Ciencias Biológicas. Nos graduamos en 1973 y al año siguiente nos incorporamos como investigadores al Instituto Español de Oceanografía, él en el Centro de Santander y yo en el de Palma. Pepe se oriento al estudio de los ecosistemas pelágicos y yo al de los demersales. Él se doctoro en la Universidad Complutense en 1989 con una tesis sobre el atún rojo y yo en la Universitat de les Illes Balears en 1991 con una tesis sobre la merluza europea. Hemos asumido a lo largo de nuestras carreras diversas responsabilidades, como por ejemplo cuando entre 1989 y 1993 Pepe presidió el Standing Committee on Research and Statistics del International Commission for the Conservation of Atlantic Tunas (ICCAT), yo era vicepresidente del Scientific, Technical and Economic Committee for Fisheries (STECF) de la Comisión Europea. En algunas reuniones trabajamos conjuntamente y  entre 1996 y 2002 coincidimos en Roma trabajando en el Departamento de Pesca de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

cerquero

A lo largo de la conversación, Pepe me explicó que actualmente la temporada de pesca de los cerqueros que capturan atún en las aguas del Mediterráneo comienza en la tercera semana de mayo y dura cuatro semanas. Sin embargo, dada la abundancia actual de atún rojo, en los últimos años las cuotas de pesca de algunas compañías pesqueras se han completado en poco más de 24 horas, lo que supone una altísima captura por unidad de esfuerzo pesquero, un indicador del buen estado de la biomasa de la población. Esta rapidez con la que se realiza la pesca permite además que los cardúmenes de atún rojo naden a placer durante más de un mes antes de iniciar el viaje de vuelta al océano Atlántico a principios de julio donde permanecerán hasta su regreso a las zonas de puesta del Mediterráneo occidental en la siguiente primavera.

Pero también me comentó que hace solo unos años la situación era muy diferente. El organismo internacional responsable del seguimiento y gestión de esta pesquería es la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) cuya sede está en Madrid. Esta organización, detecto un serio peligro de colapso de las pesquerías que se relacionaba con la captura intensiva de juveniles en el Atlántico iniciada en los años 1950 y por ello adoptó las primeras cuotas de captura. A partir de los años 1970 surgió en el Mediterráneo una flota de cerqueros dirigida a la captura de atún rojo que durante las dos décadas siguientes, entre 1970 y 1995, ejerció una muy considerable presión sobre adultos y juveniles, alcanzando un record de captura de 50.000 toneladas en 1995, lo que constituye una prueba del enorme potencial de la población de atún rojo en el Mediterráneo. A partir de los últimos años 1990 la presión pesquera siguió creciendo y se inicio la captura de reproductores para el engorde en jaulas, lo que conllevó pesca ilegal y capturas no declaradas. Entonces el engorde de atún rojo en jaulas constituía una preocupación importante para los científicos. En 2004 publique un artículo en mi blog sobre este tema http://pereoliver.net/Textos/fisheriries/Tuna%20farming.pdf.

jaulas

En 1998 ICCAT impuso una captura máxima anual de 32.000 toneladas para el stock del oeste. Pero la flota de cerco en el Mediterráneo había crecido para entonces de forma alarmante, sobre todo las flotas de Francia e Italia. Esta circunstancia se producía bajo la protección de la Política Pesquera de la Unión Europea que no se adhirió a la ICCAT hasta los años 2000 y que ignoraba la recomendación de 1991 relativa al esfuerzo de los cerqueros congeladores en el Mediterráneo. Solo España siguió la recomendación de ICCAT autorizando una flota de solo 6 cerqueros que es la que se mantiene a día de hoy.

En 2006, 2008 y 2010, los expertos de ICCAT señalaron las dificultades para evaluar la población del Atlántico a causa de la falta de estadísticas de pesca fiables en el Mediterráneo. Todos los indicadores apuntaban a una caída drástica de los reproductores y por ello ICCAT recomendó una urgente reducción del esfuerzo de pesca para evitar el colapso. Al final se adoptó un Plan de Recuperación Plurianual que incluía una reducción gradual de la captura máxima permitida que en 2012 fue de 12.000 toneladas y un peso mínimo de captura de 30 kilos que equivale a 120 centímetros de talla y a 4 años de edad. Esto suponía una eliminación de las pesquerías realizadas sobre juveniles. En los años que el Plan de Recuperación se ha mantenido se ha intensificado el seguimiento científico de la pesquería incluidos controles de la actividad pesquera y se han implementado otras medidas de conservación ya existentes. Todo ello ha contribuido a revertir la situación y a lograr la recuperación del stock como anunciaba la evaluación científica de 2012. En este nuevo escenario la población reproductora se ha doblado y la mortalidad juvenil ha caído a los valores más bajos de toda la serie histórica de la pesquería. En la actualidad el peso medio de la captura es de 100 kilos que equivalen a 7 años de vida, en lugar de los datos registrados en los últimos 40 años en que fue de 25 kilos equivalentes a 3 años. Como consecuencia de ello ICCAT ha subido para los próximos 3 años la captura máxima permitida y se espera que en 2017 la captura anual pueda ser de 22.000 toneladas.

En cualquier caso no se debe perder de vista que la espectacular y rápida recuperación se ha visto potenciada por el extraordinario resultado de la puesta de 2003, debido probablemente a unas condiciones ambientales muy favorables para la supervivencia larvaria que se dieron ese año. Esto dio lugar a un año excelente en el reclutamiento y con toda seguridad esta clase anual ha estado contribuyendo a los buenos resultados de años posteriores constituyendo la base de las capturas en los últimos años.

a la plancha 3

De lo que no cabe duda es que el atún rojo del Atlántico este, la tonyina, cuyas capturas anuales se podrían situar en 22.000 toneladas al año, casi su totalidad pescadas en el Mediterráneo, es un producto pesquero de una calidad gastronómica excelente. Sobre todo el que llega al Mediterráneo en mayo y junio en su mejor condición de engrasamiento para realizar el desove. El atún rojo siempre constituye uno de los grandes placeres de la gastronomía marinera y en mi opinión la mejor manera de prepararlo para el consumo es a la plancha de forma sencilla y sin necesidad de grandes aderezos ni condimentos. No obstante son múltiples las formas de prepararlo y consumirlo, fresco, crudo en salazón, en conserva o cocinado de formas diversas, como por ejemplo el marmitako sin obviar  la gran demanda del mercado de sushi y sashimi.

En el post numero 4 de este blog, publicado en septiembre de 2014 y titulado “¿El Bonito del País vasco y el de Mallorca, son la misma especie?, me refería a los atunes en general y a su pesca. Allí comentaba que la captura realizada en 2012 de atunes de todo tipo en todo el mundo fue casi 10 millones de toneladas y que tres especies, las caballas (Scomber spp.), el listado (Katsuwomus pelamis) y el rabil (Thunnus albacores), suponen casi el 70% de la captura total, mientras que la de atún rojo  (Thunnus thynnus) fue de solo unas 12.000 toneladas. Incluso en el caso que se pudiera estabilizar la captura anual en cerca de las 22.000 o incluso 30.000 toneladas la pesca de atún rojo será muy rentable y un producto comercial escaso y muy apreciado entre los diferentes atunes que se pescan en diferentes mares y océanos.

One comment on “#38. Sobre el atún rojo. Thunnus thynnus
  1. Esta muy bien tu articulo sobre el atún rojo, pero te ha faltado nombrar la pesqueria mas histórica que hay la «Pesca con linea de mano» y las mas socio-ecomica que hay.
    Saludos

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